La Reproducción Celular
Es una función muy importante, ya que permite el desarrollo
y el crecimiento del organismo.
Por lo tanto, la reproducción celular es muy intensa durante
la gestación y, después del parto, en las etapas de la niñez y la adolescencia.
Dentro del cuerpo humano hay diferentes tipos de células, de
acuerdo con el trabajo que realizan. Algunas pueden dividirse, como las de la
piel, que están reproduciéndose permanentemente para reponer sus pérdidas
constantes.
Otras no son capaces de reponer la parte de órgano que se
destruye, como las del tejido nervioso.
En otros casos, las células sólo se reproducen en caso de
que el órgano lo necesite, como las células del hígado.
Las células se reproducen y dan origen a células hijas
mediante un proceso de división.
Existen tres tipos de división celular.
CLASES DE REPRODUCCIÓN Celular
DIRECTA
Este tipo de división sólo tiene lugar en células muy
sencillas, por ejemplo, las bacterias, que carecen de un núcleo diferenciado.
El protoplasma se estrangula y el material celular se
reparte entre las células hijas.
INDIRECTA O MITOSIS
Es la forma más común de división celular y tiene lugar en
células somáticas (del cuerpo), que presentan doble número de cromosomas
(diploides).
Consiste en duplicar y distribuir los cromosomas en los
núcleos de las dos células resultantes.
De esta manera, las células hijas mantienen el mismo número
de cromosomas que la célula de origen.
REDUCCIONAL O MEIOSIS
Da origen a los gametos (óvulos y espermatozoides). Mientras
que en la mitosis las células hijas son diploides, en la meiosis quedan con la
mitad del número de cromosomas de la especie; Es
Decir, Son Haploides
En la fecundación,
las células haploides se unen y recomponen en la célula huevo o cigota el
número cromosómico de la especie.
En la especie humana, el número cromosómico está formado por
22 parejas de células autosomas y una pareja de cromosomas sexuales.
REPRODUCCIÓN CELULAR INDIRECTA O MITOSIS
- INTERFASE
2. PREFASE
3. METAFASE
4. ANAFASE
5. TELOFASE
Los filamentos de cromatina
se acortan y estrechan para
dar origen a los cromosomas,
que constituyen dos filamentos
idénticos unidos por un
centrómero. Paralelamente,
los centríolos se ubican en
los polos opuestos de una
célula a través de un huso
que se origina entre ellos.
Los cromosomas se ubican en
una línea. La célula ya está
lista para dividirse en dos
“células hijas”. Cada una de
ellas tendrá una copia de ADN.
Los centrómeros se escinden
y el número de cromosomas
de la célula se duplica a
medida que el citoplasma
se estrangula.
Al mismo tiempo, las fibras
del huso se acortan y empujan
a centrómeros y cromosomas
hacia polos opuestos.
Finalmente, la célula queda
dividida en dos “células hijas”.
Cada una de ellas presenta un
número idéntico de
cromosomas, formados por
delgados filamentos de
cromatina. En cada célula,
se observa la presencia de
una membrana nuclear